El juez incompetente


Van dos seguidas, y esto huela ya fatal. Tan mal, que me veo obligado a escribir este artículo.

Ayer conocimos como el juez disciplinario de la ACB, Juan Ramón Montero volvía a declararse públicamente incompetente. No entiendo de términos jurídicos, pero tras sus dos últimas decisiones, la que viene a decir, es que nunca jamás llevará la contraria a un árbitro, haga lo que haga éste, porque no es su ámbito de competencia. El está para temas disciplinarios, que si uno se pega, o que si algún despistado tira una bola de papel al campo, pero que para los asuntos de verdad, los que requieren de una decisión de un juez, se da mus, y se seguirá dando mus para siempre.

De esta forma, el juez incompetente deja a los clubes ACB a merced del ojo biriqui de cada árbitro en un partido.

Supongamos un árbitro con tan mala leche, que una vez acabado el partido, pero digo una vez... digo 5 minutos después de acabado el partido, coge un jugador mientras el equipo que ha ganado hace un corrillo en centro, y mete una canasta. Y como el árbitro le tiene tirria al entrenador de turno, va y da la canasta por buena. Este estúpido supuesto, sólo lo pongo porque según la argumentación del incompetente juez, el equipo al que le meten la canasta y el árbitro la da por buena, no tiene a quien llorar ni quejarse. No tiene nada. No hay nadie por encima del árbitro para tomar una decisión contradictoria.

La canasta de Dikudis que el juez de la Euroliga Meirim mandó repetir en aquella semifinal del 2001, quedaría impune en la ACB. Este juez, es incompetente. El baloncesto tiene aquí un agujero que lo desautoriza como competición. Si un árbitro se equivoca, da igual, no hay ninguna institución que le corrija. Eso sólo puede pasar en esta competición ACB.

En el fútbol, si un árbitro saca una tarjeta amarilla a un jugador que luego se demuestra que no la merecía, un tribunal se la quita. No voy a entrar en lo que me parece esto, pero al menos, hay alguien por encima del árbitro que lucha por la justicia de un campeonato serio.

Dicho esto, que nadie interprete que opino que el Manresa debió ganar ese partido. En mi forma de pensar, manresa debió perderlo, porque si reviso el reloj en los últimos dos segundos, lo reviso a lo largo de los 40... y si pillo a la mesa poniendo el reloj en el primer cuarto un segundo más tarde impugno de nuevo el partido. Esta opinión, me cambia de forma radical en el precedente anterior, la famosa canasta fuera de tiempo de Salgado. Aquí creo que si los 40 minutos han pasado, cualquier actuación, ya sea canasta, falta o lo que sea, debe anularse. Pero claro, esa es mi justicia, y esas serían mis argumentaciones en caso de que fuese el juez.

El fondo del artículo no va en si Manresa, Barcelona o Bilbao tienen razón. El fondo va en que la ACB está completamente desamparada. Hay un juez que no juzga.

Si es un incompetente, que lo cambien ya.
Si se debe crear un tribunal, que se cree.

Que se haga lo que se deba hacer, pero que al fin se dote de justicia a una competición que la merece.

Seguiremos en las manos de los árbitros. Aunque se equivoquen a posta.

Iruzkinak

  1. Totalmente de acuerdo, pero también pienso que deberían establecerse, a la vez que este tribunal, multas para aquellos que rajen de los árbitros como en la NBA.

    Sino esto seguirá siendo un cachondeo...

    Salu2

    ErantzunEzabatu
  2. Es que este tipo de decisiones sobre canastas en el último segundo...se deberían resolver sobre la cancha y con el instant replay se televise o no el partido, sea de liga regular, copa o play off el partido...

    Asi evitaremos este tipo de pólemicas, o decidir repeticiones de choques como en su día sucedió con el Aek vs Baskonia...

    ErantzunEzabatu

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