Con el ojo en otra parte

Todo un BASKONIA-BARSA (anda que no hay entidad en este choque) merecía otro contexto. Ni para el Barsa ni para el Baskonia, este partido tendrá la capitalidad o la importancia que de por sí requiere, y es una pena, pero que le vamos a hacer, los calendarios los carga el diablo, y no pregunta a nadie.

Vamos una por una desgranando las claves del choque.

1. Acierto. La clave de siempre. Metemos, luego defendemos, luego reboteamos, luego seguimos metiendo. No metemos, luego no defendemos, luego no reboteamos, luego cada vez metemos menos. HAY QUE SALIR DE ESTE MALDITO CÍRCULO VICIOSO CUANTO ANTES. El orden de los factores, SI altera el producto. El día en que primero defendamos, luego reboteemos, para finalmente meter, será el día en el que el Baskonia pase de ser un equipo capaz de ganar partidos a ser un equipo capaz de ganar títulos. Si no invertimos esa ecuación, este año nos vamos de vacío. No se me ocurre mejor semana para cambiar que esta. De hecho, sólo se me ocurre esta clave. De hecho, sigo sin entender como un equipo de Dusko mantienes esta ecuación invertida. Si no cambiamos esto, no hay más que hablar.

2. La segunda y fundamental que asoma a este partido es la inmediatez del playoff de cuartos de la Euroliga. El Baskonia mira a Moscú y el Barsa a Madrid. Los dos jugarán un partido serio, pero el saber que en los próximos 16 días deben disputar 7 encuentros lo marca todo. El Barsa va sobrado de efectivos, por lo que lo notará menos, pero el Baskonia lo necesita todo, y no se puede pegar un sprint en el primer kilómetro de una marathon. Dusko no hablará de esto, ni los jugadores... y quizá la prensa tampoco se atreva a hacerlo, pero yo si. Si queremos que Teletovic, San Emeterio, English, Ribas o Huertas se partan el pecho durante cerca de 35 minutos en Moscú, no pueden jugar 40 el sábado...

3. Me gustó la actitud y minutos que tuvo Herrmann en Madrid. En un partido para olvidar, siempre se pueden sacar conclusiones positivas. Pete Mickeal el sábado y, sobre todo, Siskauskas el martes le esperan con los brazos abiertos. A San Emeterio, todo pundonor, puede que le falte un puntito de físico para parar a estos dos jugadores (a pesar de que ha parado ya con efectividad a jugadores como Mumbrú). Herrmann está mucho mejor que hace dos semanas... la inyección de confianza de la prórroga frente a la Cibona, y la minutada de Madrid le hacen ser más peligroso.

4. Juego interior. ¿Sin Tiago ni Eliyahu? Barac no va a saber ni por donde le ataca Fran Vazquez... se lo va a encontrar volando sobre su cabeza cada vez que mire para arriba. Bastante tendrá Stanco con intentar pegarse con N’Dong o Lorbec... A Mirza le costará encontrar en la pintura a pivots como Morris o Trías. Ahora los verá, ahora no... Es duro decir esto, pero mientras Tiago no esté para imponer la ley bajo los aros, equipos como el Barsa son inalcanzables para nuestros pivots. ¿Solución? Centrarse en retener el rebote defensivo (aquí, por favor, concentración máxima), que para eso si que tenemos potencial, y no despistarse con las segundas ayudas, ya que el Barsa es de los equipos que mejor mueven el balón por dentro de la liga ACB. Explotar nuestras virtudes y esconder nuestras (importantes) carencias.

5. Dirección. Hace unos meses escribí en este blog un artículo que se titulaba “Ricky Bussiness”, en el que aseguraba que Ricky no tenía la calidad suficiente como para justificar su precio de mercado. Bien, llegado el mes de Marzo, es momento de tragarme una a una mis palabras y felicitar, por una parte a los regidores del Barsa por su importante apuesta, y por otra al chaval, que es un crack de agárrate y no te menees. Cosas como esta me hace darme cuenta de que a veces escribo como si lo supiese todo, cuando en realidad, tengo las ideas justitas... Sea como sea, Ricky da una dimensión diferente al Barsa. Tener un jugador como este, capaz de cambiar por si sólo el signo de un partido, es la guinda que el Barsa necesitaba a un proyecto espectacular. Además, Pascual ha sido capaz de hacer jugar a los tres bases a la vez sin estridencias... Sada, Lakovic y Ricky es, sin ninguna duda, la mejor dirección de Europa. No se rotan para dar descanso... se rotan para aportar cosas diferentes y para incrementar la ya de por si altísima intensidad de este equipo. Enfrente, la pareja Marce-Ribas, para los que este partido va a ser un gran entrenamiento para lo que se les avecina en Moscú. Lo tendrán difícil para salir victoriosos de su guerra personal, pero deben ser lo suficientemente inteligentes para no irse del partido, y mantener al Baskonia fuerte en su ritmo propio de partido.

Acabo. Si Tiago está al 100%, que juegue. Si le falta aunque sea un 5%, que descanse. Eliyahu, que descanse. En esta vida, hay que saber priorizar esfuerzos. Ayer lo decía Tiago en una entrevista. Un día se le ocurrió jugar un partido de liga contra el Valencia y se perdió la Copa. Yo quiero a Tiago pegándose con Sasha Kaun o con Mensa Bonsu, no necesito verle pegarse con Fran Vázquez para recordarme que es mucho mejor que el gallego...

Una pena de partido frente al Barsa. Pero bueno, ya volveremos a jugar contra ellos en Paris, el 7 de mayo... y ese día estaremos todos, y todos bien...