Duro palo

Semana dura para el baskonismo, sobre todo por esa derrota en casa frente al Khimki que deja la clasificación para la próxima fase de la Euroliga muy cara. Muchas claves han propiciado ese bajón que tuvo el equipo el jueves, claves que casi se repitieron ayer frente a Valencia, pero que el equipo supo enmendar a tiempo.

Sabéis que no soy amigo de críticas destructivas, sino que me gusta mirar en positivo... Ahora bien, para crecer hay que saber reflexionar sobre los errores cometidos, y ojo, que uno de los objetivos históricamente más asequibles para nuestro equipo espera en escasos cuatro días.

La primera pregunta es.. ¿Que pasó el jueves y domingo para que el Baskonia diese ese paso atrás?

1. Horrorosa dirección. Dos han sido las claves principales del bajón, pero quizá la principal haya sido la ausencia de una dirección clara del equipo. Marcelinho no ha sido ese base incisivo, agresivo y valiente que ha sido durante el resto de la temporada. Parece haber caído en un pequeño bache de juego del que esperemos salga pronto, pero ha perdido muchos balones, ha equivocado las opciones prioritarias para el equipo y no ha sabido imprimir el ritmo necesario. Pau Ribas no es que haya hecho dos malos partidos, porque no es cierto, sobre todo frente a Valencia, aunque ha estado lejos de ser un buen director de partidos. Fijaos que, en mi opinión, quién mejor ha dirigido al grupo ha sido Singletary, aunque está claro que es un jugador que no acaba de gozar de los galones que necesita un buen base para ser dominante. Conclusión; Ante la falta de dirección, Dusko apostó por los tres juntos en cancha en los momentos de la verdad frente al Khinki, algo que no acabó de funcionar... Ayer frente a Valencia, el caso fue casi más sangrante. Toca reaccionar, y toca hacerlo ya.

2. Falta de defensa. Tan importante como la ausencia de dirección ha sido la laxa defensa practicada por el equipo estos dos últimos partidos. Se que este aspecto es fácilmente mejorable, ya que ha demostrado ser capaz de defender, aunque sorprende el hecho de haber visto esta situación precisamente durante el partido más importante de la temporada. Los garrafales agujeros en la defensa a los bases, la “no llegada” a las segundas ayudas y la falta de compenetración en la defensa del bloqueo directo ha matado al Baskonia.

3. Los dos aspectos anteriores son la clave de lo ocurrido, aunque han existido más factores, por supuesto. El siguiente en orden de prioridad es la falta de acierto en el tiro exterior. No, mejor voy a cambiar de argumento... El problema no es que el tiro no entre... eso les pasa a todos los equipos en algún momento de la temporada... el problema es la ausencia de un Plan B cuando esto ocurre. Un buen equipo debe ser capaz de asumir que ese día llevas 1/16 en triples y cambiar de estrategia en el último cuarto. Ahí hay varios jugadores que tienen mucho que decir... No vamos a pedir a Teletovic que juegue de otra manera, porque quizá no esté preparado para ello, pero si se lo puedo exigir a jugadores como San Emeterio, como Pau Ribas, como Herrmann o como Oleson. Hablamos de jugadores muy inteligentes, con sobrada capacidad para penetrar y con la suficiente potencia como para hacerlo. También debo exigir a Marcelinho que plantee los ataques de otra forma, que busque más a los pivots, que busque opciones al poste alto o que juegue el pick and roll buscando opciones más sencillas. También Dusko tiene una gran parte de responsabilidad en todo esto.. Fue incapaz de cortar una vía que claramente nos llevaba a lo que nos llevó. Todo ellos es, por supuesto, un camino mucho más complicado para remontar que el simple hecho de tirar triples, pero claro... a veces no entran, y no se puede morir en un acto de fe... ¡¡Ya entrarán!! Además, los tiros entran mucho más fácil cuando la intensidad defensiva es buena. Fijaos y os daréis cuenta de que cuando un equipo defiende flojo, y el rival le hace canasta con facilidad, sus porcentajes en ataque se van al infierno.. Al contrario, cuando ahogas al rival en defensa, dios es mucho más justo con los porcentajes.

4. Plantilla al completo. ¿Es ese un problema? Por supuesto... No a largo plazo, ya que cuando todos se hayan subido al tren, hay muchos más remando... El problema es cuando reman siete en el tren, y se carga con 12. Lo decía ayer Dusko en la sala de prensa y yo no hacía más que darle la razón... Cuando tienes que incorporar a 12 tíos a la vez, no se juega igual que cuando juegas con siete, y encima esos siete están como motos. El Jueves jugaron 12 en el Baskonia... ¡¡12!! Los tres bases, los cinco aleros y los cuatro pivots. Y de esos 12, Oleson, Splitter, Barac, Herrmann y Dean estaban fuera de covertura, por unas razones u otras. No seamos tremendistas, esto le pasa al Baskonia y le pasa a muchos otros equipos... Si no das minutos a los jugadores que quieres incorporar, no acabas de incorporarlos nunca, y es necesario pasar por el purgatorio de vez en cuando... esperemos que para la Copa su nivel sea otro.

Dicho todo esto, que nadie se lleve la sensación de que estoy criticando una situación sin salida. En absoluto. Estoy convencido de que los dos males principales del equipo se solucionarán de forma rápida... Marcelinho es un jugador muy inteligente, que seguro sabrá reaccionar y que además obtendrá un plus de motivación por jugar en “su” Bilbao la Copa del rey. Una copa motiva lo suficiente como para que los problemas defensivos se queden en el vestuario, y el porcentaje de acierto exterior, que ha acompañado al Baskonia durante toda la temporada volverá con un mayor rigor ofensivo y defensivo. Cuatro días por delante es mucho tiempo para que Splitter llegue mejor de su tobillo, para que Eliyahu pueda descansar un poco, para que Oleson siga integrándose o para que Barac recupere su valor estratégico en el equipo.

Tengo mucha confianza en este grupo, y estoy seguro de que será capaz de oler la sangre que ofrece la Copa. Ah! Por cierto.. Que a nadie se le olvide echar un vistazo a la clasificación de la liga ACB... El Baskonia marcha segundo, a dos triunfos del tercero, y con sólo tres partidos perdidos en su casillero. Benditos problemas...