Tetracampeón de bolos

El Baskonia, contra todo pronóstico (por momento de juego anterior al torneo) demostró, de nuevo, su competitividad máxima y se llevó de nuevo el trofeo al campeón de bolos de verano. ¡Zorionak!

Lo primero de todo, quiero decir que tras asistir en directo al torneo, he cambiado mi concepción de la Supercopa, una competición a la que sabéis que nunca he tenido un gran cariño. Pero me ha gustado, y mucho, el ambiente de basket que se ha vivido en el pabellón Príncipe Felipe esta semana, y he vibrado con los tres partidos que se han disputado (aunque para que engañaros, sólo he visto en directo los dos del Baskonia). No es una Copa del Rey, pero para estar en Septiembre, se le parece... Y se le parece en el ambiente por una Zaragoza donde su casco viejo vivía de bufandas y camisetas de equipos de baloncesto. Nostalgia.

El Baskonia mutó en Zaragoza de forma radical respecto a lo que mostró en san Sebastián el martes pasado, y ese cambio de “disfraz” tiene nombre y apellido propio; Pablo Prigioni, merecidísimo MVP del torneo. Todo el desorden mostrado se evaporó en cuanto el argentino agarró el balón, y los pivots, bajo el constante alimento de clarividencia que aporta Pablo, se volvieron productivos.

El Baskonia realizó dos partidos muy similares viernes y sábado. 30 minutos de un gran baloncesto, o al menos, del mejor baloncesto que puede mostrar un equipo en septiembre y 10 minutos de dudas (aunque con suerte y acierto al final). En los primeros 20 de cada partido, el Baskonia jugó con mucho orden, una defensa correcta y con mucho criterio en ataque. Destacar la coherencia en el juego de Will McDonald, que jugando junto a Stanco Barac gana muchos enteros (¿Porque Spahija no lo sacaría nunca el año pasado junto a Splitter?), y que aprovechó su buena mano para darse un baño de confianza.

Las dudas interiores, tras Will, en cualquier caso, se mantienen. Barac va a sufrir muchísimo hasta encontrar su sitio en el Baskonia. Quizá alguien debería explicar al croata que para jugar aquí, es necesaria una dosis de dureza y concentración importantes, más allá de la buena mano a 4 metros. Telétovic, sigue siendo el mismo jugador del año pasado. Es muy probable que a muchos les valga con eso, pero no a mi. Me exaspera su desidia defensiva. El traje que un veteranísimo Larry Lewis le hizo a medida a Teletovic en el último cuarto de la final es un dibujo perfecto del desinterés y bajo nivel defensivo del bosnio. Peeeeero, Teletovic lo arregla con acciones como el triple frontal que puso al Baskonia con media Supercopa en el bolsillo.

Poco conozco a Dusko si creo que a base de triples Mirza se va a ganar un hueco en el equipo. ¿Será capaz de “ponerse” a defender? De lo visto en Zaragoza, me quedo con la duda.

¿Y nuestro amigo Txakur? A más. A mi, su participación en la final, me gustó, y creo que dio un paso al frente respecto a la semifinal, y dos respecto al partido frente al Bruesa. Si, es cierto que sufrió para subir el balón cuando jugadores como Sada le presionaban, pero entiendo que es una cuestión de confianza, y no de manejo de balón. En defensa, tiene una buena intensidad y actividad, y ve el juego de ayudas con claridad. Ofensivamente, es donde necesita soltarse algo más. Demasiado encorsetado en los sistemas de ataque, estaba más preocupado de no fallar en una de sus posiciones que en buscar alguna chispa de clase, pero jugó con el criterio que se le exige a un base suplente. Ni tiró a destiempo ni buscó mayor protagonismo que el que en estos momentos merece. Y cuando tuvo la oportunidad, penetró y buscó la asistencia.

Habrá quien diga que un equipo como el Baskonia necesita algo más de su base suplente, pero creo que Txakur, con paciencia y confianza podría darlo. Comentando esto con mi amigo Josipwells, me recordaba que viésemos lo que el Barsa nos puso enfrente; Un Andre Barret, oscuro objeto del deseo del Baskonia durante todo el verano y tres veces más caro que Txakur, que aportó algo menos de lo que hizo nuestro Mustafá.

¿Y los aleros? Muy bien, gracias. Cuando Fernando se acople bien con Prigioni y Pete Mickeal coja la forma, el juego exterior del Baskonia va a ser una maravilla y una gozada para el ojo del espectador. Tenemos de todo, tiro, penetración, determinación, capacidad de generación, defensa, polivalencia, rebote, contundencia. Me encanta la configuración de este grupo de aleros. Todo un acierto.

Mención aparte para Dusko. Lo vi bastante bien... hay que tener en cuenta que en estos momentos no tiene demasiadas opciones de rotación en el base ni en el pivot, pero aún así, fue capaz de rotar bien a sus jugadores para llegar fresco a los minutos finales con los jugadores importantes. Le vi varias variantes defensivas que me gustaron y que no vi en los cuatro años anteriores de Duskismo, y en ataque, vi como además del espacio para el sistema, dejaba lugar al lucimiento personal a través del 1x1 y el 2x2. Me gusta como quiere dibujar al Baskonia.

En fin, que el Baskonia se vuelve a llevar el primer bolo importante, y que el optimismo vuelve al pabellón Araba. Sólo me dio pena ganar el partido por una persona. Mi primo Currito... Ayer tuvo que dormir mal el jodido...

Pd. He cambiado mi primer parrafo por no coincidir con la crónica publicada por Bob. Ya es casualidad, pero es que la frase hecha invitaba...